Fusionar el Derecho Deportivo con el arbitraje, la decisión de Valentina Gómez de CASDA

Valentina Gómez Girarlo es una de los nuevos talentos del arbitraje antioqueño, desde el 2016 viene ejerciendo su actividad de juzgamiento, en la actualidad hace parte de la nómina de la Corporación Arbitral y Social CASDA cuyo presidente es el árbitro de actuación mundial Wilmar Alexander Roldán Pérez.

El Escenario de los Clásicos la abordó, su reportero le indagó porqué se metió a una profesión tan compleja y, qué aspira a futuro, tanto para su actividad deportiva como profesional.

En sus inicios, recibir un primer pago económico de $ 278.000 por pitar algunos partidos de niños de categoría Párvulos en Envigado, le dio suficiente motivación para que le animara a seguir la carrera arbitral.

Valentina, ¿a parte del arbitraje, a qué más se dedica?

“Yo estudió derecho en la Universidad Envigado en el octavo semestre, me quiero especializar en Derecho Deportivo, fusionar lo que es el arbitraje con el derecho y más temas de contratación, pues lo que más se ve es tema de contratos”.

¿Sus comienzos en el juzgamiento?

“Primero empecé la Corporación Deportiva los Paisitas, allá tenemos una asociación de árbitros que se llama Árbitros los Paisitas. Allí tuve dos padrinos que son Gilberto Uribe y Horacio Vélez que me ayudaron en Envigado, había un colegio llamado Colafer, pero este desapareció”.

¿Entonces, se sintió apoyada en sus comienzos?

 “En ese momento, tuve un partido muy difícil y yo dije, yo no quiero más esto y ellos me dijeron, vamos para la Corporación Deportiva los Paisitas, allá aprende, va a hacer asistencias, allí me encontré con varios compañeros que había tenido en un curso de arbitraje en el año 2018 en la Corporación CASDA, tuve la oportunidad de iniciar en el entonces llamado Pony Fútbol. Entonces, ellos (los compañeros), me dijeron- “vamos, haga el curso con nosotros y le ayudamos”.

¿Fue bien rodeada?

“En la Corporación los Paisitas, empecé y allá todos me fueron puliendo cada compañero que me veía me decía lo que tenía que hacer, Carlos Echavarría, por ejemplo, para mí es una eminencia porque mi primer partido me dijo-“ a Usted se le ve muy buena actitud, se le ven ganas, eso se lo reconozco mucho, pero tiene que hacer esto, coja el banderín así, póngale el dedito aquí para que no se le vaya hacia atrás, para que no se le se le desvíe mucho el banderín, después desplácese de esta forma,  para que pueda ser capaz de ir puliendo su técnica. Ahí me hice árbitra y en CASDA rectifiqué todo lo que había aprendido en la práctica”.

¿Cuál es su referente mundial en el arbitraje?

“Mi referente es Wilmar Roldán. Le soy sincera, yo de él tenía una apreciación muy diferente hasta que ya empecé a tratarlo un poquito más en el colegio, me doy cuenta que en serio Wilmar Roldán es una persona que es una eminencia, por la forma en que habla, que se expresa, le gusta estudiar, le gusta aprender, no le gusta quedarse quieto, él tiene que ir más allá, él no se queda con lo poquito que le dicen, él tiene que investigar y él ya le encanta enseñar y he tenido la oportunidad de aprender mucho”.

¿Cómo te ves en tu futuro?

“Siendo profesional en el derecho, sino también árbitra, con un poquito más de escalafón, porque en días pasados hablaba con mi padrino (Vélez) y él me dice que: - “usted es un árbitro profesional así, que la escarapela es lo único que da un poquito más de renombre, pero esto te hace profesional o no, porque es que todos estudiamos para hacer árbitros, desde que usted lo desempeña, es un profesional en el arbitraje”-. Y pues yo dije, si tienes razón lo que usted me dice”.

¿Cómo es su percepción del arbitraje en Colombia?

“A nivel aficionado es mal pago, pero a nivel profesional es un poco más gratificante. De nivel, lo veo muy alto, cada vez tratamos de que sea menos los errores, que haya más juego y que el árbitro no se note, siento que un buen nivel”.

Vivencias

“Lo que más me ha marcado la vida fue la muerte de mi mamá, esa situación ha sido mi inspiración para superarme cada día. Mamá falleció en un accidente de tránsito hace 10 años, ella estaba muy joven, tenía 33 años, yo tenía 12 años. Un momento difícil que no se le desea a nadie, pero también agradezco que esté descansando y no esté aquí sufriendo por consecuencias de ese accidente o dependiendo de alguien más en una cama, porque era una mujer demasiado independiente, alegre, carismática, empática, le gustaba ayudar, era una mujer echada para adelante, también era abogada”.

Algo que recuerde con alegría del arbitraje…

“Podría hablar de mi primer central en el Baby Fútbol este año, un logro que para mi es muy grande, un escenario donde las cámaras están encima de uno, la gente está mirando quién es, si se equivocó o no, ese día no cabía de felicidad en la ropa, porque me fue muy bien gracias a Dios, tuve un muy buen partido”.