Historias de vida (4). Sandra, la itagüiseña más mexicana. Una mujer GRANDE en talento


Con una vasta experiencia en la parte administrativa del deporte, con un gran carisma y don de gentes, la talentosa dirigente nos contó como ha venido abriéndose camino en la vida.

Una de las dirigentes más destacadas y talentosas de Itagüí es la Licenciada en Educación Física del Politécnico Jaime Isaza Cadavid, Sandra Milena Zapata Acevedo, con un camino arduo, pero fructífero en su vasto recorrido por el deporte.

Amante de la cultura mexicana, no descarta que el algún día, pueda laborar en el país “manito” haciendo lo que más le gusta, la parte social y deportiva que tanto quiere.

Una vez al frente del reportero de El Escenario de los Clásicos, se destapó y contó aspectos de su vida que no se tenía conocimiento, así fue el diálogo:   

¿Dónde nació y cómo era su entorno familiar?

“Bueno, yo nací en Medellín, en el mes de diciembre, mi entorno familiar, pues crecí con un padre hasta los nueve años, lamentablemente pues falleció de cáncer en los pulmones, el bendito cigarrillo, y bien, pues una infancia con precariedades, pero bien vivida, se supo vivir, se supo disfrutar”.

¿Y otros recuerdos que tenga de su familia, de su edad?

“Siempre de pequeña pues he sido como muy activa en las cosas de la casa, siempre estando ahí presente para todos”.

¿Cómo fue su experiencia en la escuela?

“La chiqui, la chiqui en la escuela”.

¿Por qué le decían la chiqui?

“Por mi estatura, “por alta”, pero no soy una mujer alta sino una mujer grande. Desde la escuela, la fogosidad, la alegría, siempre al servicio de mis amigas. Empezamos también mucho con el tema del deporte, me acuerdo estando en cuarto de primaria hacía el torneo cuando salíamos a recreo y me decían, ud va a perder el año por estar jugando, que yo era más pendiente de organizar qué equipos de las compañeras jugaban y estar pues, también concentrada en clase”.

¿qué aspiraciones tenías cuando era joven?

“Yo quería ser bióloga marina, me tocaba ir a hacer la práctica sería al río Medellín porque en el momento no había forma de nada de eso”.

¿Tuvo algún maestro o mentor que influyó en su vida?

“En todo este cuento deportivo, nos fuimos acercando a los líderes del barrio En ellos Juan Carlos Franco, que tenía su escuela de fútbol en el barrio, entonces uno se iba los sábados a ayudarle a recoger balones, peticos y cositas así. En el colegio también éramos muy activas en el tema deportivo con el profe Pedro García y nos fuimos inclinando como por ese medio deportivo, ya entramos a la acción comunal, al comité de deportes y fuimos haciendo los torneos barriales, empezamos a sacar equipos con los mismos amigos, con los mismos compañeros para disfrutar de esa actividad”.

¿Qué desafíos se enfrentó en su camino y cómo lo superó?

“Bueno, desafíos económicos, ya que solo contábamos con un aporte económico de mi madre. Nosotros, mi hermano y yo, tuvimos que quedarnos mucho tiempo solos en casa, ya que mi padre, por la enfermedad entonces, era hospital-casa, casa-hospital. Afortunadamente salimos siendo buenos muchachos, buenos hijos. ¿Retos? Cuando salí del colegio, a ver uno para dónde coge, porque sin un tema económico no había los beneficios que hay ahora, matrícula cero para estudiar en las universidades, empezamos a conformar grupos deportivos, un grupo de jueces, de ahí, con eso, teníamos una sostenibilidad económica, cada ocho días o hasta en semana pitábamos en empresas, entonces, digamos, ahí teníamos con qué medio subsistir, afortunadamente se llegó un beneficio laboral como monitora en la Secretaría de Deportes, en ese entonces, en el 2004, yo veía a mis compañeros Fernando Escobar, el difunto Mauricio Bedoya, César Ceballos, Juan Carlos Franco, Elkin Ospina y yo decía, yo quiero ser como ellos, un promotor deportivo, entonces me dijeron negrita, póngase pilas a estudiar. Entonces ya hicimos el esfuerzo económico para ingresar a la universidad y afortunadamente pudimos llevar a cabo la carrera de licenciatura en el Politécnico, con mucha dificultad, pero gracias a Dios la sacamos a flote y se han venido presentando beneficios laborales que, gracias a Dios, hoy estamos donde estamos”.

¿Podríamos decir que ese es su mayor logro o hay uno mayor?

“Para mí la universidad ha sido un excelente logro, porque fue de mi cuenta para todo, o sea, las fotos de los grados, los pasajes de los grados, mi carrera, fue netamente mía, entonces es un logro muy, muy, muy importante para mí”.

¿Qué pasatiempos o intereses ha desarrollado a lo largo de los años? “Pasatiempos, me gusta conocer pueblos, me gusta caminar trochas Disfrutar, disfrutar de la naturaleza”.

Usted ya siempre era conocida como una persona muy social, lo social le interesa mucho. ¿Cómo equilibra su vida profesional con su vida personal? “Muchas veces si no se... Usted no para, porque uno llega a la casa, se cambia, vuelve y sale, va para la cancha, va para un evento, voy a hacer esto, voy a hacer lo otro, pero ese es el ritmo de vida, yo creo que, si algún día paramos, como que no vamos a encontrarle sentido, porque una vez yo sí me cuestioné con el de arriba (Dios), y le dije, bueno, ¿yo para qué estoy acá? y no sé, por ahí fluye una palabra Servir. Inclusive yo la anoté en un calendario. Servir, no se me olvida, yo estoy acá para servir”.

Mirando hacia atrás ¿Hay algo que hubiese hecho de manera diferente?

“No, no creo.”

¿Qué lecciones ha aprendido a lo largo de su vida?

“Muchas. O sea, el respeto hacia los demás, la prudencia, ponerse uno, digamos en los zapatos del otro, tener visión, tener miras”.  

Usted trabaja o ha tenido esa experiencia con el público con el deporte, más que todo administrativo, en fin, lleva bastantes años Usted sabe que eso varía mucho de personal, unos años son la gente que está ahí por inercia, otros que sí saben, en fin, ¿Usted qué consejo les daría a esas futuras generaciones que vayan a administrar el deporte?

“Tienen que ser personas que les apasione el tema deportivo. Es que el tema deportivo no solo es jugar, el tema deportivo también tiene un tema administrativo, Jurídico, de leyes, que les apasione este cuento, porque la verdad es un espacio muy amplio, de muchas expectativas, de muchas recompensas, por ejemplo, uno va a ser parte, digamos, de un evento internacional como un voluntariado, eso es maravilloso”.

Como esta es una historia de vida que habla de los pasatiempos del entretenimiento, del deporte, a usted le gusta mucho el fútbol ¿De qué equipo es hincha y qué la motivó a ser hincha de ese equipo?

“Bueno, yo a nivel local soy hincha del Atlético Nacional, mi verde ¿Qué me motivó? un amigo cerca de la casa, por no irse solo para el estadio, iba y me tocaba la puerta y me decía: - “Dígale a su mamá que si la deja ir conmigo para el estadio”- Yo volteaba y le decía a mi mamá me voy para el estadio, yo no pedía el permiso, yo decía, mamá, que me voy para el estadio y llegábamos a Oriental y él me decía, -“¿Dónde te quieres sentar?”- Para arriba, le respondía –“¿Y qué quieres comer?” y de ahí surgió la pasión por el Atlético Nacional. También soy muy hincha de la selección mexicana y ya por ahí, pues, la Selección Colombia también tiene su pedacito de corazón acá”.

A la distancia, ¿cómo ve el deporte de Itagüí?

“Me voy a referir a los deportistas. Son atletas muy apasionados, atletas que dejan el sudor en su camiseta. O sea, los resultados de nosotros son gracias a esa berraquera de deportistas y también resalto a los entrenadores. Hay entrenadores con un sentido de pertenencia inmenso, también son demasiado apasionados y profesionales en su hacer. Entonces a ellos impregnar esa motivación, sus deportistas por eso tienen grandes logros. Somos una ciudad deportiva con muy buenos resultados, somos un referente también para todo el departamento de Antioquia”.

Si usted tuviera el poder de decisión ¿Qué modificaciones le daría administrativamente al deporte de Itagüí?

“En tema económico, trataría de ser muy equitativa, de pronto con el tema de los clubes, poderles brindar algo más, o sea, conformarlos como unas buenas empresas que son, por ser entes privados. Entonces, tener una articulación con ellos, en tema deportivo, en tema administrativo, en tema de formación. ¿Qué más administrativamente se podría cambiar? Los escenarios, los escenarios son lugares que debemos de tener ocupados con actividad deportiva diario, y sobre todo los fines de semana, que haya una cobertura total deportiva en el municipio”.

¿Cómo se ve Sandra Zapata a futuro?

“Ay, ay, ay, yo creo, sí me lo he cuestionado, No sé, yo no sé, no sé la verdad, no sé si acá o.… en México. Pero hay que buscar como... Bueno, allá qué alternativas tengo, si no tengo nada, entonces, ¿a qué me voy a ir? ¿Cierto? Pues hay amistades, pero venga, sentémonos, francamente, bueno, ¿hay algún proyecto que se pueda realizar? La idea sería, o sea, la idea siempre ha sido tener un espacio deportivo propio, pero acá”.

¿Qué tal un proyecto en México?

“Qué bueno uno irse a trabajar a México. Porque yo en México soy feliz, yo en México soy feliz con solo estar allá, entonces, en ese tema laboral, ¿cómo me sostendría yo? ¿Cierto? O sea, qué posibilidad puede haber para yo estar allá, o sea, que se pueda dar esa opción de ese espacio deportivo que quiero tener para brindarle a la comunidad”.

Usted sabe Sandra que, en este cuento deportivo, la vida tiene muchas anécdotas y muchas evidencias, pero siempre hay alguna o algunas que le marcan la vida a uno, ¿cuáles son las suyas?

“Bueno, una muy jocosa es en el colegio, allá también había el personaje de la tienda de apellido Ocampo, y como lo ven a uno jugando fútbol y jodiendo pues la vida en el colegio, El Chontico, ese personaje me decía Chontico.  Inclusive al Chonto Herrera le secuestraron un hijo, entonces se referían a mí, venga, ¿y usted qué hizo? ¿su Hermanito qué hizo? ¿Y la casa qué hizo? (13:08) ¿Y el papá qué hizo? Y a mí me daba risa, o sea, me referían era por eso de lo del Chontico Herrera. ¿Qué otra anécdota? No, con el tema deportivo ha habido demasiadas anécdotas muy positivas”.

Usted como quisiera ser recordada: la mexicana más itagüiseña o, la itagüiseña más mexicana…

“La itagüiseña más mexicana o la Reina del sur”.

Sandra es un honor, más que un placer, tenerla en mi página, porque usted es una de las personas que engalana nuestra web cada que tenemos la oportunidad de entrevistarla, muchas gracias, usted es una gran líder, también sueño que siga creciendo bastante en el ámbito deportivo que algún día dirija un ente, un caballo como ese del Instituto de Deportes. No está lejos, porque usted es bajita de estatura, pero muy grande en talento y usted es tan grande que puede superar los que hoy se creen grandes.

“Ayy, don Alfonso, Dios le pague por esas palabras y por la entrevista”.

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