“Volví a nacer el 2 de febrero” Emerson David Mesa Villa 2a Parte


A la izquierda la Fisioterapeuta Natahlia López Vargas quien lo ha acompañado durante todo el proceso de recuperación. Mesa Villa, un agradecido con Dios. 

(EDLC): Escuchando las declaraciones suyas y viendo sus ojos, realmente se le ve a usted el cariño, la sinceridad y el agradecimiento.

(EV): “No, es que como yo le digo a Nathalia, Nathalia es un ángel, Nathalia es un ángel que...No solo Nathalia, muchas personas, pero yo pongo el ejemplo de Nathalia: sacrificando de su tiempo, porque no solamente acá, en la casa, yo necesitaba algo y ella aparecía en la casa, a tratar, a mirar,  a ver que tenía, ella llamaba al médico, le preguntaba a cualquier persona que conociera, vea, pasa ésto, pasa aquello, entonces, ese es el ejemplo. Y mi mejor amigo, que es como mi hermano: Andrés Alzate que es una persona que siempre ha estado al lado mío y es del corazón. Ese man nunca, nunca me  dejó solo, entonces uno... esa es la fuerza que uno necesita para salir adelante”.

(EDLC): Usted es muy querido aquí en la secretaría, incluso por ahí, entre esos ángeles, porque los hay y los tenemos aquí cerquita palpaitos...aquí hay gente que se ha movido para hacer una cosita y la otra  en beneficio suyo.

(EV): “Sí, sí, bastante, bastante y como hablo y converso con mi esposa y mi suegra en la casa, yo creo que a nosotros el día del accidente nos sobraron Ángeles, Arcángeles y Querubines como dice mi suegra. Porque  es que nosotros fuimos 20 personas, unos rodamos, volamos cinco metros, otros rodaron 45 metros y otros volaron casi 50 metros, gente que se fue al río, al río Porce, para que estemos todos vivos...Mi esposa alcanzó a entrar un metro, un metro larguito al río, a ella le llegaba el agua al ombligo...Yo estaba al pie del puente, es como un puente normal de cinco metros, hacerte en la parte de abajo y mirar hacia arriba; lo que pasa es que uno no llega a visionar de noche, por ejemplo mi suegro que fue a conocer el lugar, llevó una fotos de día y eso es totalmente distinto...así como dicen por ahí: que de noche los gatos son pardos... eso es una impresión uno ver eso de día, las fotos ...Yo estoy organizando para ir, pero ver las fotos de día  y saber que uno tuvo tanta gente al lado para que le ayude a uno a salir adelante, eso mentalmente es una fuerza absoluta, uno siente toda la energía, esas oraciones; por ejemplo el martes subí a saludar a los muchachos de fútbol sala y fútbol salón y todos me dieron un abrazo, se sintieron pues en el compromiso de saludarlo a uno, inclusivo Juano y Sebastián me presentaron  los que no me conocían, me hicieron una oración, dieron agradecimientos, entonces como lo he dicho siempre: uno tiene muchos ángeles pero por encima de Dios no hay nadie”. 

(EDLC): Emerson yo me di cuenta de ésto después de haber entrado acá a laborar nuevamente, a mí me complace mucho que se esté recuperando, ya comparativamente de la fecha en que ocurrió ésto. Hablando con Nathalia me dice que con la buena disciplina que  tiene, usted se va a recuperar del todo en 2 o 3 meses. De parte de El Escenario de los Clásicos, va a ser una ventana al mundo para decirle a toda la gente que Dios existe  y que los Ángeles existen como usted lo acaba de decir.

(EV): “Si señor y no sólo Dios, la Virgen. A ver, es que yo tengo una historia muy bonita con la Virgen. No sé si de pronto...a ver, en el momento del accidente...más o menos te lo voy a describir: Acá donde estoy yo sentado en este momento, así quedé yo tirado en la grama, sí, yo tenía este pie salido del todo hacia acá, o sea, se veía todo girado desde acá y este cortada (señalándose la cabeza), entonces no tenía movilidad, yo me iba a parar y no tenía la fuerza. Yo en ese momento me acordé que tenía todos los papeles, lo que le dan a uno en las excursiones, que es el seguro de vida, entonces yo dije: lo tengo que buscar, tengo que buscar a ver qué  hay por acá y en la poca movilidad que yo tenía me encontré mi billetera, imagínese, volé cinco metros y encontré mi billetera. Cuando abrí mi billetera, yo mantengo una carterita con todos los papeles y se había salido y empecé a buscarla y en otro sector estaba la carterita con la cédula  mía, la de mi esposa y todos los papeles del seguro de vida. Me seguí moviendo y encontré mi celular, ahí estaba el celular y más adelante , por decir 3 metros, 4 metros había una imagen de la Virgen del Carmen, así paradita, como puesta, así y yo lo único que hice, porque yo no me podía parar, yo le dije a la Virgen que me encomendaba a ella, que me cuidara a mí y nos cuidara a todos nosotros para que no nos pasara nada, que yo no la podía recoger, que la tenía que dejar ahí, que muchas gracias por todo. Y pasaron los momentos, se pasó todo  el accidente, yo incluso a la salida me encontré una cobijita de mi hijo y la pedí para llevársela a mi hijo. Ya estando en el hospital fueron los de Pasescol, (los dueños de la excursión) a visitarme, a ver yo cómo seguía a ver cómo iba todo y les conté esta misma historia: que encontré la billetera, que encontré el celular, los papeles, pero que me tocó dejar una virgencita del Carmen allá y la señora me dijo: una Virgen del Carmen, ésta? Ay si señora...Ay venga, ésta Virgen del Carmen es suya? y yo, si señora, es mía. Esa imagen me la volvieron a entregar, o sea, un accidente en un sitio oscuro, baldío, pues, eso era un tierrero y esa Virgen del Carmen hacer ese retorno para aparecer a mí y esa gente no me visitó sino a mí, o sea habíamos de 17 digamos que habíamos 8 o 9 hospitalizados todavía ellos fueron a visitarme y no me visitaron sino a mí”.

(EDLC): Eso comprueba que Dios sí estaba presente...

(EV): Sí, eso comprueba más que cualquier otra cosa que nosotros estábamos cobijados por la mano del Señor, enviados por la Virgen María, los Ángeles y todos los Santos”.

(EDLC): Emerson, me alegra mucho verlo ya tan positivo, esa encharcada de esos ojos hermano, esa  alegría y agradecimiento con Dios y agradecimiento con esos Ángeles. Que Dios lo bendiga.

(EV): “Amén, muchas gracias. Yo siempre, inclusive siempre que salgo de mi casa les pido a los ángeles y a Dios que me cuiden, entonces, todos los días hay que darle gracias a Dios, darle gracias por todas esas personas que nos rodean y nos cuidan”.

(EDLC): Lo estamos esperando aquí con los brazos abiertos para que se recupere pronto.

(EV): “Queriendo Dios y muchas gracias Alfonso”.

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