En los Departamentales Escolares, Itagüí se estrenó en pesas


Wanderley Campos también ha practicado voleibol y lucha. No le gusta jugar fútbol.

Los XXIV Juegos Deportivos Escolares de Antioquia son la excusa perfecta para que los niños del departamento dejen a un lado las clases y muestren todo su talento en el deporte. Así lo hacen dos pequeños de Itagüí, quienes llegaron a estas justas a divertirse y a entregarlo todo para dejar en alto a su municipio en la primera participación en la competencia de levantamiento de pesas.

Wanderley Campos y Pablo Hurtado son los encargados de debutar en pesas con Itagüí, pues en ninguna de las versiones anteriores este municipio había participado en esta disciplina.

Así lo confirmó el entrenador Wilson Caro Tamara: “Estamos iniciando. Itagüí no tenía presencia de deportistas de levantamiento de pesas en los Juegos Escolares, ahora iniciamos y el próximo año tendremos más participantes. Le estamos apuntando a tener más representantes del municipio de Itagüí en este deporte”.

Iniciando en pesas

Wanderley Campos Gil, de 11 años, inició su práctica en pesas cuando “el profesor fue a mi escuela y nos invitó a entrenar, entonces me inscribí, lo practiqué y me gustó”. 

Para este pequeño, que lleva un año levantando pesas, lo más importante en este deporte es “tener buena técnica para poder lograr el levantamiento perfecto”.

Por su parte, Pablo Hurtado Noreña, de 12 años, lleva solo tres meses aproximadamente en esta práctica. Según el pequeño, tomó la decisión de iniciar en la halterofilia porque “quería ver mis habilidades en pesas, ver la fuerza que tenía para levantar tanto peso”.

A Pablo le gusta “la habilidad y el esfuerzo que tienes que hacer para lograr levantarla sin problemas. Con fe se puede lograr. Pero me parece más difícil el arranque, porque si no se sabe mover correctamente te puedes ir para atrás”.

Buen acompañamiento

Según explicó el entrenador Wilson Caro, estos dos pequeños “vienen de buenas familias. Ambos viven situaciones diferentes. Wanderley vive con la mamá pero ella trabaja todo el día en confecciones, por lo que él tiene que cuidarse solo. Mientras que Pablo tiene todo el acompañamiento familiar. Ahí entro yo como entrenador a ser un guía más para ellos”.

Para el entrenador es fundamental que sus dirigidos tengan un apoyo en todo momento para que no terminen en malos pasos, “yo les exijo mucho, que sean respetuosos, buenas personas, que sean puntuales y que siempre salgan derecho para la casa. Estoy pendiente de ellos para que no cojan malos hábitos”.

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