Andrés hace parte de la estirpe de los Ricaurte


El antioqueño es otro de los referentes del equipo Itagüí-Leones que este lunes buscará el ascenso en Fútbol Profesional Colombiano

Andrés Ricaurte Vélez Nació en Medellín de familia de futbolistas, Hijo de Carlos Alberto Ricaurte Daza, esa gloriosa figura de Atlético Nacional de los años 80’s y primo de Juan Guillermo Ricaurte Alvarez, también ex nacionalista, por herencia desde niño juega el balompié, a Leones llegó en este año 2016, Luis Alfonso “El Bendito” Fajardo lo invito a que se fuera a probar en el mes de enero y pasó las pruebas.

Para Ricaurte este ha sido un año positivo en los futbolístico, procedente de Águilas Doradas donde jugó en las divisiones menores, de su llegada a Itagüí dice que: “Positiva esa llegada porque administrativamente el equipo es muy bien manejado, merecía estar es una posición y lugar más cómodo donde se pudiera establecer administrativamente”. Afirma.

Recuerda el paso por Urabá como positivo, aunque su regreso a Medellín que es su entorno y donde está su familia fue mucho mejor, la tiene cerca y disfruta de más comodidad.

“Me impresionó mucho la acogida de la gente aquí en Itagüí, ni siquiera con Águilas Doradas donde estuve tanto tiempo me sentí tan motivado, uno llegar en el bus y ver esa fila tan grande, la verdad es sorprendente”. Dice el futbolista de la dinastía Ricaurte.

Admira el fútbol del mejor el mundo Lionel Messi, en su posición su referente es el argentino Juan Román Riquelme.

Recuerda mucho su primer gol como profesional jugando para las Águilas Doradas, fue un partido contra el Huila en la ciudad de Neiva, en aquel juego se ganó 3 x 2, el cotejo representó su primera titularidad en el equipo que en ese  entonces fue bajo la dirección de Leonel Álvarez, lo rememora por que arrancaron ganando con su gol y para la historia quedó como la anotación número 100 de esa institución en la Liga Águila.

A Leonel lo evoca por haber sido el primer técnico que le dio la confianza y la oportunidad de jugar: “si bien tuve técnicos anteriormente que me habían dado oportunidades, pero no como Leonel, él se la jugó conmigo y me metía sin importar que yo fuera más joven que los otros compañeros”. Indicó Ricaurte.

También tiene en su memoria de una forma especial a Hernán Torres y al “Chusco” Sierra, de los cuales también aprendió mucho.

Su futuro lo ve y lo visualiza feliz, jugando lo que más le gusta, el fútbol, a unas pocas horas del partido trascendental para Leones, va con mucha motivación y convicción que se puede lograr el ascenso.

No le cabe duda que si logran el ascenso, su vida futbolística mejoraría porque sería un progreso que le abriría otras posibilidades en el fútbol y por supuesto más reconocimiento.

En Leones se siente como en familia: “Es un grupo que es muy joven, muy amigable y hay confianza entre todos que es lo fundamental para los logros obtenidos”. Apuntó Ricaurte Vélez.

A la gente que está leyendo esta nota les dice: “Que nos acompañen, que sepan que los jugadores de la “B” Profesional son muy buenos, que sigan más el torneo de la “B” porque hay veces que es muy olvidado, ya que la mayor afición está es por los lados de los equipos grandes, que se animen a seguir más el torneo”. Subrayó el número 16 de Itagüí-Leones.

Del presidente de Leones afirma textualmente “Una personota” y de la señora Liliana la esposa del presidente “es la mamá de todos, ambos son unos padres para nosotros y el trato es maravilloso”. Comentó Ricaurte.

Carlos su padre dice de él: “Le doy mucha cantaleta porque en la actualidad, si no se es dinámico, no se puede jugar. Le digo que se prepare muy bien. Con la pelota sabe bastante, es talentoso y a eso le tiene que sumar la dinámica: si no está bien preparado físicamente, es muy difícil”.    

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