“Me metí de portero, me amañe y me quedé ahí” Cristian López

Con su 1.91 mts de estatura, es uno de los goleros más seguros de este Ditaires F.C, nacido en el Chocó, como muchos muchachos que se vienen a Medellín a buscar oportunidades, Cristian Camilo López Vergara encontró la suya en este equipo itagüiseño Campeón Nacional.

¿Usted de dónde es?

“Nací en Quibdó, Chocó”.

¿Y desde qué edad se vino para Medellín?

“Desde los 11 años me vine acá a jugar a las escuelas de Atlético Nacional”.

¿Y por qué se vino a jugar acá; en Quibdó no había oportunidades?

“No, no, no había mucha oportunidad que digamos, era todo muy escaso y acá me trajo mi hermano y me presenté a las escuelas del Nacional y al mes pasé a las divisiones menores”.

¿Usted recuerda en qué año fue eso?

“2008”.

¿Usted cuánto mide?

“1.91”

Con esa estatura, usted por qué se metió a este deporte, por qué no lo hizo al baloncesto, voleibol, e incluso de atleta, ¿por qué en fútbol?

“Porque mi papá siempre ha jugado fútbol desde chiquito, entonces nos inculcaron eso, que nos gustara mucho el fútbol y el deporte...yo creo que es el que más se mueve en este mundo”.

¿Siempre de portero?

“No, antes jugaba de central”.

¿Y cómo le iba ahí?

“De central, bien, chiquitico cometía muchos errores”.

¿Quién lo descubrió como portero?

“Un día, la historia de casi todos los arqueros, no fue el portero y me metí ahí y me quedó gustando”.

¿Y le fue bien?

“Sí, me fue bien, ahí me quedé, ahí me amañé”.

Entonces llegó a Medellín y  en qué equipo comenzó a jugar y ¿cómo fueron esos inicios?

“Llegué a Medellín en 2008 y al mes me llamaron de la Selección Chocó, yo había participado en tres selecciones Chocó, jugué Pony Fútbol con Chocó, dos años, llegué acá al Nacional, al mes me eligieron para las divisiones menores, pasé y jugué Pony Fútbol con Nacional, clasificamos a la Marte, año 2008. De ahí sigue la Sub 13 hasta Sub 16 en Nacional, de ahí paso a Itagüí, de ahí dejé de jugar fútbol un año porque me lesioné la espalda”.

Itagüí ¿dónde?

“Itagüí, Águilas Doradas”. En  Águilas Doradas, duré año y medio ahí, tuve la fortuna de trabajar con el equipo profesional casi todo el año, dejé de jugar fútbol un año porque me descubrieron un problema en la espalda, terapia, terapia, terapia todos los días. De ahí pasé a un equipo llamado Olympia que entrenábamos en Sabaneta y luego pasé al Once Caldas, en Once Caldas duré un año y medio”.

¿Siempre en división inferiores?

“En Once Caldas estuve en un partido profesional de Liga, cuartos de final contra Independiente Santa Fe en El Campín”.

¿Y qué tal le fue?

“Estuve de suplente”.

¿En Las Águilas Doradas jugó algún partido profesional?

“No, no, entrenaba con ellos”.

¿A quién tenía usted arriba de porteros?.

“Estaban  “Prono” Velásquez, Roberto Mosquera y Jaime  Brand Gómez nos entrenaba”.

Entonces, ¿cómo llega a Itagüí y a Ditaires?

“Este año tenía un viaje en enero que nunca salió y Cristian Osorio me llamó...”

¿Un viaje para dónde?

“Para Uruguay”.

¿Qué pasó?

“No, no salieron las cosas, estaban pidiendo plata, a lo último  nos salieron con un cuento chino como dicen por ahí. Cristian Osorio me llamó y me dijo que si quería participar en el proyecto que estaban haciendo, vine y me gustó me quedé”.

¿Y qué tal le ha ido?

“Muy bien, muy bien gracias a Dios”.

Yo le he visto algunos partidos, tanto Intermunicipal, algún que otro partido en Ditaires, los entrenamientos; a usted le va muy bien con esa estatura en la puerta.

“Sí, sí, uno entrena todos los días para seguir  mejorando y mejorando. Gracias a Dios en algunos partidos he tenido la fortuna de sacar el arco en cero, otros han hecho goles, pero para eso se entrena diario, para mejorar”.

Usted tiene ahí tres compañeros, tres cerrojos en la puerta también que llamo yo en el fútbol; ¿cómo es esa relación ahí de colegaje para turnarse el puesto?

“Muy bien, muy bien. Gracias a Dios construimos una excelente familia los cuatro arqueros que somos, con el profesor Albeiro Zapata, cuando le toca a uno, siempre uno hace la fuerza que le vaya bien, porque sí le va a ir mal a él a todos nos va mal porque todos entrenamos la semana juntos. Gracias a Dios que nos llevamos muy bien y a parte de lo futbolístico, afuera somos muy amigos”. 

Yo veo en esos cuatro porteros, hay dos muy altos, que son Alex y usted y pues Johan es un poco más bajito pero sin dejar de ser alto, pero el bajito, Daniel. ¿Cómo es eso: Daniel con ustedes ahí?

“Daniel, Daniel es una persona muy especial, buen amigo, sí estatura bajita pero muy volador, muy volador, le va muy bien, tiene mucha potencia”.

¿Cuál ha sido su mejor momento en Ditaires F.C?

“Mi mejor momento en Ditaires F.C? Creo que una racha que tuve de cinco partidos con el arco invicto, me estaba yendo muy bien y ahora campeones del Sub-23 Nacional”.

¿Cuál es el “parcero” suyo en este equipo?

“No, no, hay muchos amigos, más que todo comparte uno con la Pantera, con Alex Agudelo, con Johan Pérez, más que todo con los arqueros que siempre están entrenando ahí, Jeison Medina también está, Santiago Bedoya, hay muchos”.

Anteriormente en el fútbol profesional, Atlético Nacional tenía un técnico, se llamaba Oswaldo Juan Zubeldía y en los hoteles repartía a los jugadores así: los porteros en una habitación, los delanteros en otra, bueno así sucesivamente; hacen lo mismo con ustedes?

“Hacen lo mismo, sí”.

¿Y, eso en  qué ayuda?

“De pronto darle confianza al compañero que le toque. Cómo siempre van a estar las líneas juntas ahí, la línea defensiva, el portero, los delanteros, entonces hablar sobre lo que va a ser el partido”.

¿Cuál ha sido el logra más grande suyo?

“El logro más grande?, el partido que tuve en Bogotá de suplente, ese fue el más grande. El estadio lleno, repleto, cuartos de final, para clasificar a la Semi-final”.

 

¿Qué se siente, a pesar de no estar tapando de titular, pero qué se siente estar viendo todo ese lleno de El Campín cómo es de grande y ser uno protagonista aunque sea en la suplencia?

“La presión es grande y más si le toca a uno actuar; trata uno de estar tranquilo, pero igual siempre se siente  cosquillitas en el estómago, como dicen por ahí, siempre la presión es muy grande”.

¿Quién era el arquero del Once Caldas en ese entonces?

“Era Sergio Román, el tercer arquero, yo venía siendo el cuarto, porque a Cuadrado lo habían expulsado el partido anterior y Juan Carlos Henao estaba lesionado”.

¿A quién tuvo de técnico allá?

“A Flavio Torres”.

Hablemos de técnicos a propósito de Flavio Torres; a ¿cuál técnico le ha aprendido más?

“Le aprendí mucho a Humberto Sierra en Once Caldas; estaba siempre pendiente de mi, los errores que cometía siempre me corregía. Han pasado muchos, Flavio Torres también fue un buen técnico, Javier Arango también es un excelente técnico, de todos se aprende un poquito, se saca lo mejor de todos”. 

¿Usted por qué lloró la última vez?

“La última vez que lloré...un familiar que falleció, muy cercano”.

¿Usted tiene novia?

“No, no, soltero”.

¿Cuántos años tiene?

“Veinte”.

Un hombre con el porte suyo, la estatura, la talla atlética que tiene, los partidos que se juega, lo protagonista que es; ¿no le llueve por ahí una que otra mirada de alguna mujer?

“Sí, si llueven mujeres, pero toca uno estar concentrado en lo de uno, metido en el cuento de ésto que hay que tener mucha disciplina”.

¿Cuál es el sueño?

“El sueño?, pues yo creo que el sueño de todos los que estamos acá es jugar fútbol profesional y más con Ditaires  que sean jugadores de aquí de Itagüí con el proyecto que estamos ahora, jugar fútbol profesional y partir a Europa”.

Yo veo en ese equipo una gran cantidad de muchachos que jugaron en Las Águilas Doradas. ¿De pronto le tocó jugar con muchos de ellos?

“Sí, sí, con la mayoría: con La Pantera me tocó jugar mucho tiempo, Johan el arquero también estuvo ahí,...quién más? Ya los otros que estuvieron: Brian y el Che no estuvieron en la época que nosotros estábamos”.

¿Cómo ve usted éste proyecto Ditaires para la profesional?

“Muy bien, muy bien, lo veo muy bien, gracias al patrocinio que tenemos que nos mantiene muy bien dotados, muy bien económicamente, el proyecto está bien y a nosotros nos queda es responder quedando campeones de lo que estamos jugando para que ellos miren que aquí hay una buena base y nos puedan meter allá el otro año, en una primera B profesional”.

¿Cuál es la vivencia suya, el recuerdo, la anécdota que jamás se le olvida en el fútbol?

“En el fútbol? Una final en Manizales, estábamos jugando un torneo allá de La Patria, íbamos 1-1, me hicieron un gol por error mío, 2-1 perdiendo, en el último minuto, empata el compañero y nos vamos a los penaltis y me tapo cuatro penaltis. Yo creo que es el momento más bonito que he vivido”.

Hay algo en el fútbol y es de qué el portero puede ser figura 89 minutos, pero en el último minuto, sí la embarra, ya es el villano.

“Así es, así es, la posición de nosotros es muy desagradecida, pero en eso nos metimos y trata uno de responder al máximo lo que uno pueda”.

Pero sí atajas 4 penales, pues ahí sí es el héroe.

“Es el héroe, pero si pierde el equipo ya queda uno de villano, entonces eso es el fútbol y esa es la posición del arquero, toca estar concentrado los 90 minutos y tratar de que no le metan a uno un gol”.

Usted con quién vive, ¿cuál es el entorno de su familia?

“Yo vivo con un tío, mi mamá y mi papá viven en Quibdó, trabajan en Quibdó, pero la familia mía es de acá, de Antioquia”.

¿Usted qué hace, estudia, trabaja?

“Trabajo. Entreno acá en las mañanas, luego salgo, tengo un negocio en Cristo Rey Guayabal”.

¿Y académicamente qué ha hecho?

“Académicamente terminé el bachillerato”.

¿Piensa estudiar alguna cosa?

“Sí, sí, Profesional en Deportes, pienso estudiar”.

Envíele un mensaje a toda la gente que va a leer ésta entrevista; a todos aquellos muchachos que están por ahí un poco sin saber qué hacer y que les gusta el fútbol.

“Los invito a que luchen por su sueño, que nunca desistan de él, que no hay nada mejor que hacer lo que a uno le gusta; todos los días uno trabaja de la mejor manera y que hay que tener mucha disciplina, mucha paciencia, hay veces que las cosas no salen y esos días son los que hay que luchar más con uno mismo y que después se ve el resultado”.

Cristian, es un placer, un honor tenerlo aquí en las páginas de El Escenario de los Clásicos. Dios lo bendiga hombre.

“Muchas gracias don Alfonso. Gracias a usted por éstas entrevistas que nos hace a nosotros los futbolistas. Muy buenas”.